Ayer apenas llegué al IPEM 199 donde trabajo me enteré que salí electo en un sorteo entre profesores de la escuela, y gané un huevo de Pascuas.
En el primer recreo el vice director fue con el huevo a la sala de profesores y lo dejó sobre la mesa. Yo no sabía de eso, y estaba en el aula aún, charlando con una alumna que tenía unas dudas sobre el próximo examen. El vice director fue hasta el aula, me encontró y me pidió que vaya a la sala de profesores a ver que "había algo para usté", sonriéndome. Tardé menos de un minuto en llegar a la sala, y un grande y hermoso huevo estaba siendo abierto entre dos profesores, uno de Geografia y otro de Química, mientras decían: "Miren lo que han dejado para nosotors... ¿Quiere profe Gago, saque un poquito nomás así alcanza para los otros profes?". "Ah, mire qué casualidad, yo hoy me gané un huevo", le espeté. "¡Uh! Entonces no era joda eso del sorteo -me contestó el de Química-. Éste es su huevo! Uh, disculpe, no sabía... lléveselo", y yo miraba un montoncito de curvas chocolatadas depredadas ya por diez manos docentes y hasta dos manos de preceptora. "No, gracias, ya está. Nos vemos", Y siguó: "Pero venga, coma un poquito al menos, si el huevo es suyo", "No, tá bien, yo al huevo lo como el día de pascua, déjelo nomás", "Si quiere le traigo uno el lunes, profe, disculpe".
Y yo regresé, sin contestar, al aula y después a mi casa, sin el huevo que me había ganado. Después se quejan de que los alumnos son atolondrados y gamberros... Felices Pascuas, la casa tiene de todo menos orden...
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